Pacientes “vuelven a la sociedad” con novedoso tratamiento para evitar crisis epilépticas

Por Eugenia Velásquez, periodista.

Un tercio de las personas que sufren de Epilepsia son resistentes a los procesos farmacológicos para disminuir las convulsiones. El doctor Carlos M. Millán, un reconocido neurólogo y epileptólogo del Baptist Health Miami Neuroscience Institute, ha desarrollado un innovador tratamiento que consiste en colocar un aparato que funciona como un marca pasos con electrodos en el cerebro para leer la actividad eléctrica. Con este mecanismo se han logrado resultados muy satisfactorios, frenando así la frecuencia de las crisis epilépticas en los pacientes, algo que les permite salir del aislamiento y retomar su vida social y laboral. Esta experiencia fue conocida en el  XII Simposio Internacional de Neurología.

La epilepsia en El Salvador es una enfermedad que pasa desapercibida, a pesar de que la sufren actualmente cerca de un millón y medio de personas, según datos del doctor en neurología, Nemesio Portillo, miembro de la Asociación de Ciencias Neurológicas de El Salvador. El galeno manifiesta que es un padecimiento que se da en todos los estratos sociales, que provoca discriminación social y que afecta en gran medida la calidad de vida y oportunidades laborales de quien debe convivir con esa dolencia.

Según el doctor Portillo, hay varios factores que influyen en que las personas padezcan de epilepsia, estos van desde la función genética, en el nacimiento, como los traumatismos craneoencefálicos, hasta los malos hábitos adquiridos en la etapa adulta como la drogadicción y el alcoholismo. Explicó que se le conoce como una patología de niños, dado que el 80% de los casos se generan desde el nacimiento; sin embargo, desde el embarazo de la mujer se pueden dar otros aspectos que influyen negativamente en el feto.

“En el trabajo de parto es donde más epilépticos se fabrican, por todos los traumatismos y durante el embarazo de nuestras mujeres, que son vapuleadas por sus esposos y factores económicos no favorables, no comen bien, comen lo que pueden y el niño se alimenta, o se infectan muy frecuentemente, porque el esposo también tiene otras necesidades y ella va incluida en eso y la contamina con problemas infecciosos”, ahondó el doctor Portillo.

Un tercio de la población que adolece de Epilepsia son resistentes a los tratamientos farmacológicos orientados a reducir las crisis epilépticas o como se les conoce: “convulsiones frecuentes”, señala el doctor Carlos M. Millán, un reconocido neurólogo y epileptólogo del Baptist Health Miami Neuroscience Institute. A este segmento de la población resistente a los fármacos contra la Epilepsia es que va dirigida la nueva técnica que el doctor Millán ha desarrollado en el Instituto y que ha venido a compartir con sus colegas salvadoreños.

“Cuando tenemos un paciente con dos fármacos y adicionamos un tercero, el beneficio no es mucho mejor y el paciente estará con crisis, el porcentaje de beneficio será más o menos del 1% al 2% y los efectos adversos se van a incrementar exponencialmente”, manifiesta el neurólogo y epileptólogo Millán.

Como parte de la cooperación que el Baptist Health Miami Neuroscience Institute ofrece al país, el doctor Millán ha venido por primera vez a El Salvador a mostrar a la comunidad científica la más reciente innovación médica para el tratamiento de la Epilepsia, en el marco del XII Simposio Internacional de Neurología, realizado entre el 29 de mayo al 31 de mayo, evento en donde se abordan temas de gran relevancia en el área neurológica junto a la Asociación Neurológicas de El Salvador (ACNES).

“Anteriormente, hace muchos años lo que se hacía era dar más medicamentos, el paciente terminaba con efectos adversos de todos estos medicamentos, terminaba somnoliento, no podía funcionar en la sociedad, no podía trabajar y a veces seguía con crisis epilépticas”, ahondó el doctor Millán.

¿En qué consiste la nueva técnica para tratar la Epilepsia?

Según el médico Millán, es una terapia llamada “neuro modulación”, que consiste en colocar una especie de marcapasos, que en términos sencillos es un electrodo que se pone dentro del cerebro, justo en el sitio en donde se encuentra el foco epiléptico. Este aparato lo que hace es detectar la actividad eléctrica anormal y detenerla a través de un estímulo eléctrico. Es tan eficaz manifiesta Millán, que ni el paciente se percata de que tuvo una crisis epiléptica.

Este proceso se realizó en un paciente con epilepsia que se generaba en ambos lóbulos temporales del cerebro, que es una zona que no se puede intervenir porque el daño sería muy severo, expresa Millán.

“En este caso específico de este paciente, le pusimos un aparato como un computador con electrodos que lee la actividad eléctrica del cerebro y le podemos enseñar al computador cuándo detectar esa actividad y cuándo hacer una descarga para que la actividad eléctrica anormal no se propague y el paciente ni siquiera sienta que tuvo una crisis epiléptica, porque se detiene muy a tiempo”, indica el doctor Millán.

Añade que este mecanismo resulta ser muy efectivo para los pacientes. “Son casos muy satisfactorios, son personas que están de vuelta a la sociedad, a sus trabajos, de vuelta a conducir”, indicó.

Según dijo, es una terapia novedosa que ya está aprobada en Estados Unidos desde 2013, junto a otras como el estimulador del nervio vago y se prevé que más adelante se autorice el estimulador de ganglios basales profundos.

Para que los pacientes se beneficien de este procedimiento deben ser referidos a un centro especializado de Epilepsia, específicamente para cirugía de Epilepsia. En esta unidad se les realizan estudios para poder ser admitidos a la unidad especial de monitoreo de Epilepsia, la cual permite identificar de dónde vienen las crisis epilépticas.

El doctor Millán añadió que no todas las crisis epilépticas se manifiestan con convulsiones, también pueden ocasionar una especie de lagunas mentales en la persona, como quedarse con la mirada fija sin responder a estímulos externos. Otro de los factores que influyen en la manifestación de la enfermedad como tal, son los accidentes cerebro vasculares que dejan una especie de cicatriz en el cerebro que genera actividad eléctrica anormal. Estos casos se han presentado con mayor énfasis en personas mayores.

El Baptist Health Miami Neuroscience Institute ofrece las técnicas más completas e              innovadoras para diagnosticar y tratar el cerebro, la columna vertebral y el sistema nervioso. Clasificado por U. S. News & World Report como uno de los mejores programas de neurología y neurocirugía del país. El Miami Neuroscience Institute adopta un enfoque multidisciplinario en la atención al paciente, que va desde tratamientos no quirúrgicos y procedimientos mínimamente invasivos hasta cirugías complejas del cerebro y la columna.